15.11.09

Difícil de entender




Viejas Locas volvió a los escenarios tras nueve años y el resultado fue una mezclas de sensaciones, con más decepción que alegría: el recital empezó y terminó a cualquier hora, a la banda le faltó vuelo y, previo al show, hubo incidentes que dejaron un saldo de 30 heridos y 40 detenidos, con una incomprensible y bochornosa represión policial.

Los medios tienen material para explotar durante una semana. El regreso de Pity Álvarez con el grupo que lo llevó a lo más alto de la historia del Rock Nacional salió en todos los titulares del domingo por lo que ocurrió en la previa y no por lo que fue el espectáculo en sí. Por un lado, la viveza (que sería mejor llamarla boludez) criolla de querer colarse y ver un espectáculo sin haber pagado la entrada; y por otro, la falta de organización, tanto de la producción (se nota que tiene menos rock que La Metro) como de la seguridad. Es una vergüenza que hoy en día, las personas que están vestidas y tienen el oficio de cuidarnos y protegernos, disfruten tanto de tener un palo en la mano y mostrar su autoridad a base de golpes y agresión. Como dijo el Indio Solari: las balas traen mala suerte.

Ahora, vayamos a lo que fuimos a ver: Viejas Locas en Vélez. En cuanto al recital, también la sensación de decepción estuvo presente, aunque volver a ver a una banda icono, que tuvo su apogeo en la segunda mitad de los ’90, da cierta alegría, más si ese grupo te marcó musicalmente y te encaminó hacia un fanatismo por el rocanrol.



Alrededor de las once de la noche, tras una introducción con videos de Elvis Presley, Los Plateros, Gardel, Rolling Stones, Jackson 5 y Roger Waters, “Intoxicado” fue el tema elegido para abrir el show, sucedido por una lluvia de fuegos artificiales como si estuviésemos en navidad o año nuevo. El dicho no se equivoca, no hay que festejar antes de tiempo.

Muchos baches entre canción y canción y un Cristian "Pity" Álvarez igual de imprevisible y extravagante (para quienes creían que no sería así), que revoleó desde chocolates hasta una guitarra, son algunos de los tantos puntos que restaron en el recital. Otros de los momentos más flojos fue “Perra”, el excelente tema fue aruinadísimo con una zapada que duró aporximadamente ¡20 minutos!

Igualmente, dentro de tanta locura hay gracia: “Si van a tirar zapatillas que sean 41 y no tiren nada viejo, algo a la moda, no me voy a poner algo vintage“, fue una de las tantas cosas que dijo Pity.


A pesar de todos los puntos negativos, hubo momentos para destacar que sumaron para bien: como las muy buenas versiones de “Hermanos de sangre”, “Una vez más” y “El árbol de la vida”, y cuando Fabián “Fachi” Crea tomó el micrófono para cantar “Botella”. También, merece ser mencionada aparte la interpretación de “Una piba como vos”, a la que se le enganchó “The KKK took my baby away” de The Ramones.



Otras canciones que sonaron en la noche fueron: “Nena me gustas así”, “Lo artesanal”, “Balada para otra mujer”, “La simpática demonia”, “Si todavía estas ahí”, “Tornillo Eterno”, “Dámelo”, “Difícil de entender”, “Caminando con las piedras”, “Puente La Noria”, “Chico de la Oculta”, “Me gustas Mucho”, “Homero”, “Que vas a hacer tan sola hoy”, “638”, “Niños” y “Descansar en paz”.

Casi a las 3 de la madrugada del ya domingo 15, Viejas Locas finalizó su regreso con “Eva”, con un campo con más caras largas llenas de cansancio que sonrientes por felicidad.

Sensaciones encontradas en el regreso de Viejas. Al hacer un análisis en frío de lo que fue toda la joranda, es muy difícil sentirse satisfecho, aunque en la memoria puede ser muy bien recordado con el correr del tiempo haber formado parte de este recital, más allá de su resultado.




Fotos: Federico López Claro (rock.com.ar)